Algunas tenemos siempre nuestro eterno corazón enamorado, a
veces de nuestro primer amor, a veces de alguien especial que es
nuestro amor platónico, ó de ese amor que consideramos el amor
imposible, ese que creemos que no se fijara en nosotras, pero sea como
sea, en algún momento todas hemos tenido el corazón enamorado y también
muchas hemos pasado por el proceso del final de una relación, en este
proceso que por lo general termina en separación, algunas quedamos
lastimadas, otras, tranquilas, otras sensibles, pero no faltan aquellas
que se quedan enamoradas, claro quizá podemos pasar un tiempo enamoradas
ya que el proceso del desenamoramiento no tiene un tiempo determinado,
pero, ¿Qué pasa, cuando no queremos desenamorarnos?, recuerdan tal vez
el día en que finalizaron su relación y se quedaron tranquilas por fuera
y enamoradas por dentro y con el pasar de los días se dan cuenta que a
pesar de respetar la separación y la vida de la ex-pareja, siguen
pensando en el, siguen cuidando su imagen ante esa persona, siguen
queriéndolo en silencio, y algunas veces quedamos como amigos, y tal vez
sentimos celos rabiosos que nos carcomen por dentro mientras le
mostramos una linda sonrisa, tratamos de frecuentarlo lo más posible, ó a
veces tratamos de hacer todo
lo contrario con la idea de que así nos olvidaremos del pasado, pero a
pesar de nuestros esfuerzos, nuestros sentimientos siguen guardados, y a
penas oímos su nombre, lo vemos, oímos su voz, o nos topamos con lo más
mínimo que nos lo recuerde, aflora todo aquello que tratamos de
esconder y nuevamente la idea en nuestra cabecita de que seguimos
enamoradas y quizá reneguemos de nosotras mismas diciendo ¿Por qué no
puedo olvidarlo?, tranquilas Reinas preciosas, no se desesperen traten
de seguir, no puedo decirles como olvidarse, porque todas somos
distintas, a ninguna le pasa exactamente igual que a otra, pero, puedo
decirles que saldrán de esto, todo pasa y quizá no han cerrado la etapa
completa a veces nos queremos aferrar inconscientemente al pasado por el
tiempo juntos, por los recuerdos, ó por los planes, pero si no fue, no
será, Reinas enamórense primero de si mismas, del amor, y de la vida,
verán como pueden seguir con ese eterno corazón enamorado del futuro y
no del pasado.
No lo olvides Reina vive enamora del futuro y no del pasado.
Buenos días queridas les presento el blog de Eva´s, aquí les comentare historias que nos pasan ó nos pueden pasar a todas, y podrán compartir sus historias, podremos comentarnos nuestras experiencias, dejarnos pequeñas opiniones, darnos consejitos chiquitos, entre otras cosillas más, espero les agrade vuestro blog, porque esta hecho inspirado en ustedes para ustedes. Besos.
domingo, 9 de junio de 2013
No, tengo Vocación de Alfombra!!!
Reinas
queridas de mi corazón; hoy tenemos derecho a saber porque nos quieren y
para que nos quieren; no, nos dejemos llevar por las apariencias, que
no todo lo que brilla, es oro, no olvidemos que tenemos dignidad y que
valemos mucho más de lo que a veces nos quieren valorar, no dejemos que
nos engañen por fuera cuando por dentro nos están poniendo los cuernos,
nos pisotean, nos mienten y lastiman nuestros sentimientos; Reina, grita bien fuerte; ¡No tengo vocación de alfombra!
Y que te escuche el mundo entero, para que se enteren ellos, que
nosotras no nos dejaremos, no dejes que se adueñen de tu ser, de tu
vida, y de tu destino, tu tienes la palabra y el poder para decidir que
haces hoy, y que harás mañana, no todo es color rosa, pero puedes hacer
que cada día sea feliz, porque tienes el valor de amarte, y decidir a
quien quieres amar, porque hacer las cosas igual que ayer, si puedes
hacerlas mejor cada día, no repitas los errores, vive
a plenitud las los mejores días de tu vida porque cada día vale más de
lo que te imaginas, no regales tus ilusiones ni tus lagrimas, no regales
tus días entristeciendo por cosas que no valen la pena, cuando te
sientas lastimada grita bien fuerte ¡No tengo vocación de alfombra! y
que te escuche el mundo entero, para que lo recuerden siempre, y que te
escuchen ellos, para que se les grave en la frente, y recuérdalo
siempre, Reina mía, ¡No tengo vocación de alfombra!, amate.
No soy una Yes Man!!!
Una yes
man?, muchas no saben exactamente a que se refiere ser una yes man!
bueno reinas bellas una yes man!!! es aquella que acostumbra decir a
todo Sí Señor!, y nosotras no somos, ni seremos una yes man!!!, mis
reinas bellas no pueden decirle a todo Sí, ellos deben aprender que no
siempre tendrán un sí como respuesta a sus peticiones ¿por que no
podemos ser libres de responder con un rotundo y convincente NO? y no me
refiero a ese dudoso No, que puede terminar convertido en un bueno
quizá, o un bueno esta bien, tampoco ese no que en realidad quiere
decir., no se, quizá, con esas respuestas te niegas a dar un si, pero te
estas engañando a ti misma con la finalidad de no sentirte culpable
pero dejas la posibilidad latente y evidente que tu respuesta siempre
será un si a todo, y te lleva a darle una respuesta que ellos esperan,
recuerda Reina no debes decir Si, a todo, haz valer tu decisión y tu
derecho de libre opinión si tu respuesta es NO, dilo con orgullo, no te
dejes convencer por el que dirán o la duda en tu cabeza que tal ves dice
y si digo NO, se va enojar; hay infinidad de mujeres en el mundo que se
engañan a si mismas, no sumemos a las sumisas, tomemos el poder de
nuestra vida, decídete Mi Reina y cambia tu destino, restémosle poder
sobre nosotras y sumemos la lista de mujeres decididas al poder de tomar
las riendas de su vida, no dudes de hacer valer el poder de tu
respuesta, dilo con orgullo y siente orgullosa de no ser: Una Yes Man!!!.
Extremismos del corazón cerrado…
Buenas
tardes mis queridas Reinas hoy les quiero comentar sobre los pro y los
contra que nos puede traer ser tan extremadamente cerradas en nuestros
sentimientos, respecto a esta pequeña frase: Extremismos del corazón
cerrado…tenemos diversos ítems para comentar, pero hoy iniciaremos con
las causas, ¿Qué nos lleva a cerrar nuestros corazones?, ¿Qué hace que
no deseemos mostrar nuestros sentimientos?, ¿Por qué nos cerramos?, ¿Por
qué no queremos ser expresivas?, ¿Cuáles son nuestros miedos?, y así
sucesivamente podríamos crear una larga lista de razones, motivos,
causas y hasta excusas que nos llevan a tomar decisiones extremas y/o
exageradas.
Engaños, decepciones, desilusiones, traición, son algunos de los principales motivos que nos llevan a cerrar nuestros corazones y no querer mostrar nuestros sentimientos, tanto así que en algunas ocasiones tilda la frase en nuestra cabecita día a día, “No Me volveré a enamorar”, o en otras suele decir “Nunca Más, Nunca Más”, y pasamos largos e interminables días de tristeza en los que nos descuidamos de nosotras, pero sin darnos cuenta estamos cayendo en un el gravísimo error, de darle la importancia que no se merece a esa persona que nos decepciono. Sí mi Reina nos equivocamos y tenemos derecho, pero aquellos no tienen derecho de vernos lastimadas, heridas y desilusionadas, si no fue, esta bien nos va a doler y vamos a llorar, sentir y hasta quizá querer desaparecer, pero no le des el gusto de verte mal a esa persona que no te valoro lo suficiente. Después de una decepción es normal que te tomes un tiempo de duelo en el que llores tu desilusión, cuéntale tu experiencia a alguien de tu confianza, compartido duele menos, luego cierra ese capitulo y continua tu vida, que este proceso de recuperación del sentimiento no te lleve mucho tiempo puedes tomarte los días que quieras para dejar una estabilidad emocional en tu corazón pero no le dediques mucho tiempo al sufrimiento, valórate sabes lo que eres y quiérete; luego de tu proceso de aceptación y superación no permitas que la experiencia se lleva tu oportunidad de vivir grandes emociones, no cierres tu corazón, tu puedes seguir viviendo, conociendo, amando y sobretodo tener la oportunidad de conocer a esa persona que puede ser tu media naranja, nadie nos dice cuando y como llegara, pero si te cierras puedes perder la oportunidad de vivir una vida llena de emociones agradables que luego no podrás recuperar, tampoco es tratar de enamorarse de la primera persona que conoces, pero deja la puerta abierta, quizá en el camino conozcas muchos amigos, compañeros, y hasta puedes compartir momento inolvidables como tardes de café y hasta una fiestecita, quien sabe y tal ves esa persona pueda ayudarte a conocer al elegido ó destinado para ti, pero que pasaría si cierras la puerta y cierras toda posibilidad de conocer nuevas personas, vivir nuevas experiencias, no vas a encontrar al destinado con un letrero que diga, yo soy para ti, si cerramos toda posibilidad le estamos dando demasiada importancia al pasado, y no nos estamos valorando lo suficiente como las reinas que somos, si cerramos nuestro corazón nos estamos negando la oportunidad de amar y ser amadas, la oportunidad de vivir, y quien sabe si por cerrar nuestro corazón quizá perdemos la oportunidad de conocer a esa persona que nos puede amar y valorar como tanto lo deseamos. No nos neguemos las oportunidades que otros no nos niegan porque por mas decepción que nos dieron no nos negaron la oportunidad de seguir viviendo, al contrario, nos dieron la oportunidad de vivir esa experiencia por más dura que haya sido, fue una experiencia que nos va a dar valor para seguir, nos hace más fuertes, nos da el conocimiento necesarios para luego decir yo lo viví, nos da oportunidad de decir yo lo viví y lo supere, porque puedes tener la satisfacción de hacerle ver a los demás que te valoraste, que te amaste y que te diste la oportunidad de seguir viviendo; para que pasados los años no llegue el final del día y te sientas sola, para que no extrañes eso que pudiste haber vivido y no lo viviste, para que no te quede la duda del que hubiera sido de haber hecho las cosas diferentes.
No pierdas la oportunidad no dejes que te roben el derecho de vivir.
Engaños, decepciones, desilusiones, traición, son algunos de los principales motivos que nos llevan a cerrar nuestros corazones y no querer mostrar nuestros sentimientos, tanto así que en algunas ocasiones tilda la frase en nuestra cabecita día a día, “No Me volveré a enamorar”, o en otras suele decir “Nunca Más, Nunca Más”, y pasamos largos e interminables días de tristeza en los que nos descuidamos de nosotras, pero sin darnos cuenta estamos cayendo en un el gravísimo error, de darle la importancia que no se merece a esa persona que nos decepciono. Sí mi Reina nos equivocamos y tenemos derecho, pero aquellos no tienen derecho de vernos lastimadas, heridas y desilusionadas, si no fue, esta bien nos va a doler y vamos a llorar, sentir y hasta quizá querer desaparecer, pero no le des el gusto de verte mal a esa persona que no te valoro lo suficiente. Después de una decepción es normal que te tomes un tiempo de duelo en el que llores tu desilusión, cuéntale tu experiencia a alguien de tu confianza, compartido duele menos, luego cierra ese capitulo y continua tu vida, que este proceso de recuperación del sentimiento no te lleve mucho tiempo puedes tomarte los días que quieras para dejar una estabilidad emocional en tu corazón pero no le dediques mucho tiempo al sufrimiento, valórate sabes lo que eres y quiérete; luego de tu proceso de aceptación y superación no permitas que la experiencia se lleva tu oportunidad de vivir grandes emociones, no cierres tu corazón, tu puedes seguir viviendo, conociendo, amando y sobretodo tener la oportunidad de conocer a esa persona que puede ser tu media naranja, nadie nos dice cuando y como llegara, pero si te cierras puedes perder la oportunidad de vivir una vida llena de emociones agradables que luego no podrás recuperar, tampoco es tratar de enamorarse de la primera persona que conoces, pero deja la puerta abierta, quizá en el camino conozcas muchos amigos, compañeros, y hasta puedes compartir momento inolvidables como tardes de café y hasta una fiestecita, quien sabe y tal ves esa persona pueda ayudarte a conocer al elegido ó destinado para ti, pero que pasaría si cierras la puerta y cierras toda posibilidad de conocer nuevas personas, vivir nuevas experiencias, no vas a encontrar al destinado con un letrero que diga, yo soy para ti, si cerramos toda posibilidad le estamos dando demasiada importancia al pasado, y no nos estamos valorando lo suficiente como las reinas que somos, si cerramos nuestro corazón nos estamos negando la oportunidad de amar y ser amadas, la oportunidad de vivir, y quien sabe si por cerrar nuestro corazón quizá perdemos la oportunidad de conocer a esa persona que nos puede amar y valorar como tanto lo deseamos. No nos neguemos las oportunidades que otros no nos niegan porque por mas decepción que nos dieron no nos negaron la oportunidad de seguir viviendo, al contrario, nos dieron la oportunidad de vivir esa experiencia por más dura que haya sido, fue una experiencia que nos va a dar valor para seguir, nos hace más fuertes, nos da el conocimiento necesarios para luego decir yo lo viví, nos da oportunidad de decir yo lo viví y lo supere, porque puedes tener la satisfacción de hacerle ver a los demás que te valoraste, que te amaste y que te diste la oportunidad de seguir viviendo; para que pasados los años no llegue el final del día y te sientas sola, para que no extrañes eso que pudiste haber vivido y no lo viviste, para que no te quede la duda del que hubiera sido de haber hecho las cosas diferentes.
No pierdas la oportunidad no dejes que te roben el derecho de vivir.
Oh Sorpresa!
Queridas Reinas recuerdan alguna vez haberse llevado la sorpresa de su vida al descubrir que esa persona que tanto amaban, querían
ó adoraban, no era exactamente lo que ustedes creían, quizá en el
momento se sienten más que decepcionadas, pero todo pasa Reinas y deben
saber que si los descubrieron fue para bien y como dice el dicho “No hay
mal que por bien no venga”; después de ver como es la verdad ustedes
podrán decidir que sigue, no siempre son noticias trágicas, pueden ser
mentiras que algunos conocemos como las llamadas “piadosas”, pero ojo al
piojo Reinas no queremos tapar el sol con un dedo, como se dice, Reinas
bellas las decisiones esta en ustedes, pero no se dejen presionar ni
manipular ustedes tienes el derecho de tomarse su tiempo para analizar
meditar y tomar las decisiones que mejor consideren y cuidado con esas
decisiones Reinas debemos aprender a tener palabra de mujer; que se nos
respete y cuando decimos así es, pues así se queda, y no debemos
permitir que nos convenzan de algo diferente, cuidado que no siempre son
sorpresas que se puedan meditar para una posibilidad de disculpa,
recordemos que “gallina que come huevo, aunque le quemen el pico”, si lo
hizo una vez, lo volverá hacer, y no podemos pasarnos la vida
disculpando cada engaño, cada mentira es una traición a nuestra
confianza una burla a nuestra inteligencia, una humillación a nuestro
respeto, y una traiciona a la relación, aprendamos que uno de los
pilares de una relación es la confianza, sin ella no hay nada así que la
próxima vez que nos llevemos una sorpresa, tomémoslo con dignidad, sin
rebajarnos, tenemos dignidad y seguimos siendo Reinas.
¡Sed de venganza!
Reinas queridas, recuerdan haber
pasado por alguna decepción en algún momento, ya sea del corazón, del
alma, de ilusión, y se sienten lastimadas, la mayoría de veces surge en
nuestra cabecita la pregunta ¿Por qué a mi?, ó quizá esa frase “me las
vas a pagar”; y comienza nuestra ira con el deseo de cobrar venganza por
lo que nos hicieron, para algunas puede ser un pequeño lapsus que se
desvanece con el pasar de los días y luego lo vemos como un tonto
recuerdo, pero para otras esa frase que nos hierve la sangre sigue en
nuestra cabeza rondando y buscando la forma de apagar nuestra sed de
venganza, y sin darnos cuenta esta ira que crece día con día cada vez
que recordamos el momento doloroso, hace que cometamos alguna tontería
que según nosotras en ese momento puede ser correcto porque nos hace
sentir como si estuviéramos lastimando a esa persona que nos hizo sentir
tan mal, y sentimos que nos estamos vengando, pero démonos cuenta
Reinas queridas que no siempre debemos hacer caso a esa dichosa frase,
“me las vas a pagar”, ni a esa ira que nos lleva a cometer cosas
inadecuadas de las que luego nos podemos arrepentir, porque al final
solo estamos lastimándonos a nosotras mismas y podemos quedar mal ante
los demás, tenemos dignidad y sí; claro que tenemos derecho a sentirnos
decepcionadas y lastimadas, pero tomemos las cosas de quien viene,
demostremos que somos dignas de llamarnos Reinas porque no nos
rebajaremos actuando igual de sinvergüenzas tratando de vengarnos,
porque somos mejores y podemos dejar que las cosas caigan por su propio
peso, total al final el que actúa mal, pues mal acaba y nosotras veremos
luego como la vida le cobra sus malas acciones sin que nosotras
tengamos que pasar por momentos que nos decepcionaran a nosotras mismas
por nuestras acciones equivocadas; así que Reina no dejes que tu corazón
endiablado pueda más que tu razón; demuestra tu superioridad de
inteligencia ante esas personas equivocadas que creen estar
aprovechándose de nuestra humildad porque al final los equivocados son
ellos que no valoran la maravilla que eres; cuando tu cabecita tenga sed
de venganza, respira profundo y recuerda eres una Reina y como tal, no
caerás en las bajas tentaciones.
La ciega
Reinas a veces tenemos enfrente noticias o cosas que en realidad no queremos ver, a
más de una nos puede haber pasado, que nos hacemos las tontas, ciegas, o
las que no nos damos cuenta de la realidad, cuando en nuestro interior
sabemos la verdad y callamos, creemos que con nuestro silencio todo
estará bien y seguimos callando y creemos que nadie más lo ve, pero a
pesar que tratemos de cambiar las cosas, o creer en la ilusión que
nosotras creamos como nuestra realidad, la realidad es una sola y no
podemos desentendernos de ella, y en algún momento tendremos que
aterrizar en la verdad y dejar de cegarnos , y cuando esto pase será
mucho más duro para nosotras porque la verdad que estuvo frente a
nosotros desde hace mucho y no quisimos ver se hace ahora más fuerte y
nuestro dolor es más agudo, por eso Reinas no tratemos de cegarnos ante
lo evidente y no perdamos nuestro tiempo luchando en contra de lo
inevitable, debemos enfrentar lo que venga; porque mientras más pronto
pasen, las malas noticias será mucho mejor para nosotras, así tendremos
más tiempo de recuperarnos y lo superaremos más pronto de lo que nos
imaginamos, en cambio si nos cerramos en no ver la realidad y tratar de
tapar la verdad nos estamos lastimando a nosotras misma, ya que tratamos
de no pensar en eso, pero al final inconsciente o conscientemente
estamos con la constante idea en la cabeza, y nos torturamos al pensar
en que no es cierto ó en que tal ves las cosas cambien, e infinidad de
ideas que nos rondan pero al final la respuesta es la misma, y así
podemos pasar muchas semanas, meses y hasta años, pero al final la
historia es la misma, terminamos lastimadas y decepcionadas de nosotras
mismas por nuestro error, por no querer ver las cosas como son, por
tratar de ocultar la realidad, y por aferrarnos a una realidad ilusa,
que creamos en nuestra mente y no querer ver la verdad, por más dura que
sea la verdad es mejor enfrentarla desde un principio y no darle rodeos
a lo inevitable, así demostraremos que somos valientes, y que podemos
afrontar la cruda realidad; además debemos valorarnos y demostrarnos
cuanto nos amamos de no ser así, no podremos exigir que los demás nos
valoren y nos respeten.
Recuerden Reinas no nacimos con vocación de alfombra; quítate la venda de los ojos.
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